Lejos de la parafernalia política que
campea en Huetamo, dentro de un mar de historias de hombres diversos que van y
vienen por esos caminos de Dios en busca de un resquicio, un mínimo espacio o
un necesario hueco para afianzar la posibilidad de una diputación federal,
alguna local, y en especial, un espacio en el gobierno del estado, es decir, la
gubernatura, sí, esos que transitan entre dos tierras, dos climas y dos mundos diferentes,
como es lo que se limita como tierra fría, cubierta de montañas de verdes
pinos, lagos y fantasiosos senderos que desde Morelia se descuelgan rumbo a
Tacámbaro y se desvanecen desde un inmenso mirador que dibuja a lo lejos la
inhóspita Tierra Caliente, hasta tocar la panorámica Loma Larga, San Antonio de
las Huertas, Nocupétaro, Carácuaro y ahora sí entrarle al infiernillo de la
región de Huetamo.
Esa ruta es la que recorre por estos días el estimado
periodista michoacano Andrés Resillas, quien sin tufos de politiquería, y nomás
por el gusto de ilustrar a los comunicadores de la región Huetamo, avanza displicente,
desmadrugado, en su viejo carrito, acompañado de su esposa y a temprana hora de
un sábado en Huetamo, con libros, periódicos y revistas, pero sobre todo con
una cauda de conocimientos decidió regalar un curso taller gratuito de
periodismo y enseñar a todos los parvulitos en la tesitura de la informática, y
para sorpresa de todos, ahí está presente una larga lista de gente interesada en
aprender y conocer cómo hacer una nota informativa, un reportaje, una columna,
cómo organizar una entrevista, la necesidad de conocer las herramientas básicas
para editar un semanario, una revista, una página de Internet, y se muestra
sorprendido del interés despertado entre el gremio en Huetamo, aunque no así de
las autoridades municipales que observaron con desdén el arranque del curso de
16 horas, que empezara los días sábado 10 y domingo 11 de enero y concluyen
este fin de semana entre el sábado 24 y domingo 25, para cerrar ese por demás
valioso curso taller que a muchos de nosotros nos vino a quitar las lagañas, y
con la esperanza de que esta noble intención de Resillas nos haya permitido
saber que por ejemplo cada municipio de Michoacán debe contar con su propio
portal de Internet, dar a conocer los sueldos de sus funcionarios y sobre todo
explicar con pulcritud con quién, cómo y cuándo se hacen los contratos de
construcción de obras, por eso, a nombre de la pequeña comunidad de miembros de
la prensa de Huetamo, por este medio agradecemos en todo lo que vale a don
Andrés Resillas este fértil caminito que vino a abonar en la preparación de
futuros buenos comunicadores locales.
¡Orihuelazo! Seco, duro y contundente le
cayó a un sector político huetamense el destape de Chon Orihuela como abanderado del PRI, en especial a todo un
compacto grupo del clan Viveros, quien desde ramificaciones de Sedesol, la Sindicatura
y otros cargos estaban más que puestos para la gran fiesta, sin embargo será
para otra ocasión cuando le toque la suerte a Víctor Silva Tejeda contender por
la grande de Michoacán, pero quienes sí están que cantan de gusto por el arribo
de Orihuela son, sin lugar a dudas, los hermanos Carlos y Arturo Acosta, el
otro clan que domina en el Ayuntamiento y que mantienen dos regidurías, una
para Carlos y otra para la esposa de Arturo, lo que significa que les podría ir
muy bien a futuro, y quien ya se presentó en Huetamo fue Luisa María Calderón “Cocoa”,
de quien se afirma, vino, vio y venció, y a quien ya se espera con angustiosa
pasión es a san Silvano, a quienes muchos creyentes de San Lucas y Carácuaro ya
consideran santo patrono de Michoacán.
Ángel Ramírez Ortuño
No hay comentarios:
Publicar un comentario