La política en Pátzcuaro
Algunos perredistas patzcuarenses esperan
el momento para decidir si se van o con Andrés Manuel López Obrador, a su
partido Morena, no se descarta una desbandada de militantes, tan solo esperan
la oportunidad de emigrar y abandonar las filas del PRD, instituto del que ni
siquiera tiene un presidente del comité municipal desde hace más de un año,
actualmente, muchos quieren mandar ahí, pero nadie pone orden a la anarquía que
hay a su interior, incluso, se dice que el ex dirigente Ignacio Valencia Ángel,
quien en el proceso electoral de hace un año y que apoyo a los candidatos del
PAN, quiere regresar por sus fueros y retomar las riendas del PRD en este
municipio, pero esa pretensión estará en chino, porque los mismos perredistas
no lo dejaran después de la traición a su partido. No se dude que al
conformarse Morena como partido, varios perredistas se vayan para allá, aunque
también algunos van a esperar quienes se unen, para ver si les conviene o no
abandonar las filas perredistas, alegando que tal vez se vayan a Morena quienes
le hagan daño al PRD y mejor se quedan ahí.
¿Y
la feria del ocho?
Un año más y la tradicional “feria del día
8” (de diciembre) que se celebra en honor
de la Virgen de la Salud, sigue en el
olvido. Gobiernos van y gobiernos vienen y la feria sigue en el olvido, tan
solo se instala un mercadote en algunos puntos de la ciudad con venta de fruta
y mercancía extranjera (fayuca); cuando los gobiernos en turno andan en
campaña, se comprometen a rescatar esta feria en la que años atrás,
conglomeraba a moles de ciudadanos de la región de otros municipios, incluso de
otros estados del centro de la republica, ahora, todo eso se acabó, ya que a
pesar de que Pátzcuaro es pueblo mágico, nadie puede organizar una feria como
debe ser y los ejemplos para organizarla, la dan otros poblados más pequeños,
como es el caso de la tenencia de Opopeo, la comunidad indígena de Pichataro,
el mismo Santa Clara del Cobre, entre otros más que tienen más capacidad
organizativa para estos eventos, donde se da a conocer la tradición, la
cultura, las artesanías y la gastronomía de sus regiones.
Quedaron atrás aquellas ferias donde se
daban cita los habitantes de la región lacustre y se quedaba a dormir en los
portales del centro de Pátzcuaro, para el día 8 acudir desde temprano a rendir
tributo a su patrona la Virgen de la Salud y cantarle las mañanitas en la
madrugada, a pesar del frío de la temporada, incluso ahora, ya no vienen esos
indígenas, cuyos antepasados del siglo XVI elaboraron la imagen venerada, bajo
la supervisión de Vasco de Quiroga. Ahora la mal llamada feria, se realiza en
un terreno polvoroso y en malas condiciones, donde los juegos mecánicos son
instalados a pesar de la molestia de los empresarios, que luchan cada año para
que se les permita instalarse a un costado de la basílica, es decir, en la
calle Serrato, ahí donde se anteriormente y por años lo hicieron.
Ciudadanos dicen, que si es la feria del
pueblo y en honor a la venerada imagen de la Virgen de la Salud, pues entonces
la feria debe ser cerca de ella y no tan lejos como se hace ahora, pero como se
dijo, ninguna autoridad hace nada por su rescate, menos la secretaría de
turismo y la de cultura estatales, menos la de ferias del estado, así como lo
hacen con otros eventos en los lugares antes mencionados. Se espera que en el
primer informe de actividades de la alcaldesa Salma Karrum, informe algo
relacionado a esta feria tan olvidada por todas las autoridades, incluidas las
eclesiásticas.
Teresa Rivera/Pátzcuaro
No hay comentarios:
Publicar un comentario